17 diciembre 2009

90 años con la mirada hacia Oriente*



Cardenal Tomas Spidlík.



“Ahora ya no dirá ni hará más bromas”, le susurró un colega purpurado viéndolo con las vestiduras rojas y el anillo cardenalicio en el dedo. En el solemne marco del consistorio del 2003, Tomas Spidlík no se inmutó: “Eminencia –respondió-, esté seguro que continuaré diciendo y haciendo solamente bromas serias”. Pero “ahora la Providencia - dice- ha sido mejor que yo en hacer bromas, me ha hecho una sorprendente, regalándome el cumpleaños más bello”: el 17 de diciembre, el cardenal Spidlík cumplirá noventa años y para celebrarlo Benedicto XVI celebrará con él la Misa en la capilla Redemptoris Mater. Una obra de arte nacida de manos del padre Marko Rupnik y del pensamiento de Tomas Spidlík. En la entrevista a L’Osservatore Romano, el cardenal moravo – elegido para realizar la prédica a los cardenales reunidos en cónclave el 18 de abril de 2005 – recorre “como en un film” sus noventa años, recordando encuentros y yendo al núcleo de su pensamiento. Siempre con la sonrisa.

Su primer consejo es que un poco de humor nunca está de más…

Bromear es útil en una experiencia cristiana auténtica y no sólo para permanecer despiertos. La broma es una cosa seria. Racionalismo y tecnicismo absolutizan toda afirmación parcial. La broma la relativiza. La verdad no puede ser relativa pero debemos tener en cuenta nuestro conocimiento parcial de los misterios. La palabra herejía quiere decir tomar una parte por el todo. La broma, por lo tanto, es también un arma eficaz contra las herejías. Y entonces iniciemos la entrevista con un episodio gracioso. Una vez, Juan Pablo II levantó la mano para bendecidme pero yo me defendí: “Santidad, ya no puedo arrodillarme”. Y el Papa dijo: “Tampoco yo”. De aquí mi apotegma: “Santidad, ¡qué suerte que nuestras debilidades corporales comienzan por las piernas y no por la cabeza!”. El Papa comenzó a reír. ¡Hoy espero que esto todavía valga para mí!

No es algo común para todos celebrar los “primeros” noventa años con el Papa. Y, aún más, en la capilla Redemptoris Mater que significa tanto para Usted.



Benedicto XVI.



Según los cálculos bíblicos, Dios habría limitado la edad del hombre a ciento veinte años (Génesis 6, 3), por lo que – siempre bromeando – debo considerar que sólo he transcurrido tres cuartos de mi vida. Preveo pasar el último cuarto en la Roma “eterna”: tengo, al menos, treinta años por delante… Bromas aparte, es necesario seguir confiando en la Providencia. En la vida, hay momentos para mirar hacia adelante: es la mañana. Hay otros momentos para volverse hacia atrás: es el atardecer. Habiendo llegado al atardecer de mi vida, no debo caer en una proyección cinematográfica de recuerdos incoherentes que engañan, como las crónicas superficiales de los programas televisivos. Me hace falta, en cambio, una mirada contemplativa para comprender que quiere hacer todavía conmigo la Providencia.

¿Y que quiere hacer la Providencia con Usted?

Mi vida me ha llevado donde ni siquiera lo hubiera imaginado y sólo después descubrí que lo esperaba inconscientemente en mi corazón. Por decir algo, jamás habría pensado celebrar mis noventa años con el Papa y vestido de púrpura. Ciertamente no lo imaginaba cuando, a comienzos de la segunda guerra mundial, la irrupción del nazismo interrumpió brutalmente mis estudios de literatura en la universidad de Brno, alterando mis perspectivas. Ya entonces la Providencia tuvo mucho trabajo conmigo. Me ocurrió lo impensable: un agente de la Gestapo se transformó para mí en ángel visible liberándome del campo de concentración, mientras que el ángel custodio invisible me condujo a la Compañía de Jesús. Luego, San Ignacio estableció para mí otras sorpresas: el noviciado en Benesov y en Velehrad, donde está sepultado san Metodio, y el estudio de la filosofía mientras estaba en los trabajos forzados, primero con los soldados alemanes y luego con los rusos y rumanos.

Parece una paradoja: uno de los más conocidos pensadores comienza a estudiar filosofía durante los trabajos forzados…

Aprendí desde pequeño a hacer sacrificios, he debido ganarme por mí mismo el dinero para estudiar el bachillerato en mi pueblo natal de Boskovice. Pero nunca he percibido una sensación de injusticia social comparándome con los jóvenes acomodados. Más bien estaba orgulloso de mi independencia. Con la despreocupación de un proletario, me inscribí en la universidad y cayó sobre mí la verdadera prueba: la guerra.

En 1939, con veinte años, ¿cómo ha vivido “la verdadera prueba” de la segunda guerra mundial?

Vuelvo, como en un film, a mis recuerdos de setenta años atrás. Precisamente a la Navidad de 1939, la última que pasé con mis seres queridos. Mi familia era muy pobre; sin embargo, de niño nunca he tenido esa impresión. La atmósfera de aquella Navidad de 1939 era triste. Con mi padre y mi madre comimos, junto al café con leche, un pedazo de pan dulce. En silencio. Mis esperanzas eran nulas, los estudios universitarios destruidos y una única posibilidad para el futuro: la deportación. Para no pensar en eso, pasé los días entre Navidad y Año nuevo patinando salvajemente. El 31 de diciembre mi mamá me llamó al orden: “¡Ve a la iglesia!”. La obedecí más por desesperación que por devoción. Y cuando el párroco nos invitó a cantar el Te Deum “en agradecimiento al Señor por los bienes recibidos durante el año”, me quedé mudo: ¿realmente debía agradecer a Dios por lo que me había ocurrido? Venciendo no pocas dudas, también yo canté el Te Deum. Precisamente en el nuevo año, en 1940, experimenté de cerca que la Providencia te salva incluso a través de situaciones extrañas y nunca antes pensadas y, sin embargo, coherentes.

El fin de la guerra significó para Usted el estudio de la teología en Maastricht, donde fue ordenado sacerdote en 1949.

Sólo después de la guerra pude estudiar teología, yendo al exterior. En 1949, como sacerdote, estaba dispuesto a volver con mis nuevas ideas a la patria. El nuevo régimen totalitario comunista no me lo permitió. Una vez mas parecía que todo estaba perdido. Pero he aquí que, de nuevo, la Providencia obró y aquella vez se sirvió de un error “administrativo”: un superior mío se olvidó de escribir una carta y me encontré exiliado en Roma. En definitiva, la Providencia me dio la posibilidad de dedicarme a lo que, en secreto, deseaba mi corazón: el estudio de la espiritualidad oriental.

En 1951, comenzó a trabajar en Radio Vaticana y todavía hoy, el viernes por la tarde, está en el aire para comentar las lecturas de la Misa dominical…

Hay dos posibilidades para alguien que, por casi sesenta años, hace el mismo trabajo en la radio cada semana: o nadie te escucha, o los oyentes quieren escuchar siempre las mismas cosas. Según mi experiencia, voto por la segunda hipótesis. Siempre he hecho las transmisiones a partir de mis estudios sobre los Padres de la Iglesia. La conclusión es que los Padres tienen todavía que decir algo para la actualidad y, por lo tanto, no son tan antiguos. Con mi programa he tratado de ayudar a los sacerdotes en la predicación y me dicen que, bajo el comunismo, fue un servicio particularmente útil: no había ni libros ni retiros espirituales.

Usted es el maestro de la espiritualidad oriental, reconocido también por el mundo ortodoxo. ¿Cuál es el núcleo de su pensamiento?

Se lo puede adivinar simbólicamente precisamente en la capilla Redemptoris Mater, donde los mosaicos tratan de “respirar con dos pulmones”. No sólo los hombres sino también las naciones tienen una vocación, para ofrecer su contribución a la Iglesia universal. He tratado de conocer el mensaje cristiano del Oriente europeo y de darle voz en Occidente.

Profesor universitario por medio siglo pero también padre espiritual por treinta y ocho años en el Pontificio Colegio Nepomuceno. ¿Qué experiencia ha vivido?



Papa Pío XII.



He experimentado la distinción entre un moralista, que conoce las reglas de la vida espiritual, y un padre espiritual, que debe tener el conocimiento de las personas. El segundo sin el primero se expone al peligro de un vago carismatismo. El primero sin el segundo queda paralizado. Como padre espiritual del Colegio, he tenido también la oportunidad de encontrar personas que hoy llevo en mi corazón como los Papas Pío XII y Pablo VI, y el cardenal Josef Beran.

¿Puede hablarnos de estos tres encuentros?



Cardenal Josef Beran.



Cuando el Papa Pacelli recibió en audiencia a los sacerdotes del colegio, hacía poco que estaba en Roma. Quedé impresionado con lo informado que estaba, hasta en los detalles, de la triste realidad de Checoslovaquia. Tuvo palabras de estímulo para nosotros, los sacerdotes expulsados de nuestra patria. Las suyas no eran expresiones circunstanciales porque enseguida procedió a regular nuestro estado jurídico. Sabiendo que era el padre espiritual del colegio, Pío XII me dio óptimos consejos prácticos sobre cómo resolver ciertas dudas sobre la vocación de los candidatos al sacerdocio.

¿Y su encuentro con el Papa Montini?

Conocí a Pablo VI el día de la muerte de Beran, el 17 de mayo de 1969. Viví cuatro años en el Colegio junto al cardenal, expulsado de Praga en 1965, y siempre he estado dispuesto a dar testimonio para su beatificación. Poco antes de morir Beran, enfermo de cáncer, celebró la Misa en su capilla. Golpeado por una improvisa crisis respiratoria, pidió la extremaunción. Estaba junto a él tratando de sostenerlo pero no había más nada que hacer. Pablo VI, llamado por el secretario del cardenal, entró en la habitación precisamente mientras Beran estaba muriendo. Me corrí para hacerlo acercar al lecho. El Papa dio al cardenal un beso sobre la frente. He visto morir a Beran en los brazos de Pablo VI. La Providencia me puso junto a ellos.

Papas y cardenales, entonces. ¿Ha conocido de cerca también a políticos?



Alexander Dubček.



Con Dubcek y Havel he conversado sobre espiritualidad, escuchando lo que tenían para decirme de íntimo. Pero es La Pira el único político con el que he hablado de espiritualidad y de asuntos públicos, sin hacer distinciones. Estaba interesado en sus experiencias en el Kremlin con Krusciov. Y puedo testimoniar que sus famosas “profecías” eran exactas. Cinco años antes de la primavera de Praga, cuando no había signos que lo presagiaran, La Pira me dijo que tornaría pronto a mi patria. Y especificó precisamente: “dentro de cinco años”. Me parecieron bellas palabras de un visionario. Le confié mi escepticismo. Me respondió que un régimen basado en la negación de los valores cristianos no puede más que destruirse solo. La Pira ha tenido razón tanto en lo que dijo sobre la caída del totalitarismo ateo como sobre mi vuelta a la patria en los tiempos por él “profetizados”.

En 1991, Usted eligió vivir en el Centro Aletti de Roma con el padre Rupnik y un grupo de artistas. Con los años, el Centro se convirtió en un lugar de estudio de la tradición del Oriente cristiano en relación con los problemas del mundo contemporáneo.


Pablo VI.


Juntos tratamos de continuar conscientemente la tradición iconográfica según la cual la imagen visual es igual a los testimonios de la fe hablada o escrita. Más aún, tiene la precedencia, porque respeta más el misterio. Vivimos en una sociedad que abunda en imágenes pero nadie enseña a leerlas. De este modo, con frecuencia me encuentro explicando pensamientos escatológicos del film Nostalgia del director ruso Andrej Tarkovskij; luego todos quieren volver a verlo. En la Pontificia Universidad Gregoriana he dado muchos cursos sobre cómo la vida espiritual puede ser leída en los íconos. El Centro Aletti está propagando esta “belleza que salva”, una visión teológica donde prevalece un acercamiento simbólico, litúrgico.

Todo esto abre al diálogo ecuménico. Son conocidas sus relaciones de amistad en el mundo ortodoxo, tanto que entre sus alumnos está también el Patriarca Bartolomé de Constantinopla. ¿Cuál es actualmente el estado de salud del ecumenismo?

Para delinearlo, tal vez basta un episodio. Era amigo del famoso teólogo ortodoxo Dumitru Staniloe, llamado el “Rahner rumano”. Lo encontré por última vez en 1993, poco antes de su muerte. Mientras hablábamos, llegó a su casa una persona que, maravillada por nuestras relaciones amistosas, nos preguntó cual era “la diferencia fundamental entre los ortodoxos y los católicos”. No teníamos ganas de discutir pero, cediendo a la insistencia, el teólogo ortodoxo dijo: “a fin de cuentas, es la infalibilidad del Papa, que nos resulta incomprensible”. Le respondí: “Para mí no es tan incomprensible, porque también yo soy infalible”. Staniloae se puso serio: “No bromeemos sobre un tema de este género”. Pero yo le respondí: “No bromeo. Creo en la infalibilidad de mis palabras «esto es mi Cuerpo, esta es mi Sangre» en la Misa, o «yo te absuelvo» en la confesión. Y él me dijo: “¡Pero ésta es la infalibilidad de la Iglesia!”. “Y esto queremos decir – confirmé – también con el dogma de la infalibilidad del Papa”. Staniloae concluyó: “Si el problema se afrontase de ese modo, sería más fácil de discutir”.



Juan Pablo II.



¿Cuál ha sido su relación con Juan Pablo II, el primer Papa eslavo?

Hasta me ha creado cardenal, pienso que para dar más visibilidad a la espiritualidad oriental. He conocido a Juan Pablo II de cerca en 1995, durante los ejercicios espirituales cuaresmales que me pidió predicar en el Vaticano. La decisión de hacer la capilla Redemptoris Mater vino inmediatamente después. Luego nos hemos encontrado antes de sus viajes a Europa del este o cuando estaba a punto de tomar alguna decisión en el campo de la espiritualidad oriental.



Juan Pablo II y Cardenal Tomas Spidlík


¿Cómo nació en Juan Pablo II la idea de una Europa espiritualmente unida que debe volver a respirar con sus dos pulmones, oriental y occidental?

El Papa Wojtyla hizo propia la expresión “respirar con dos pulmones” del pensador ruso Vjaceslav Ivanov. A su vez, Ivanov ha utilizado esta expresión en 1926 en el momento de su reconciliación pública con la Iglesia Católica en la basílica de San Pedro.



Vjačeslav Ivanovič Ivanov.



¿Hay, por lo tanto, un pensador ruso en uno de los fundamentos del Pontificado de Wojtyla?

Ivanov, especialista de filología e historia antigua que obtuvo la licenciatura en Berlín con el célebre Mommsen, no podía aceptar que todas las grandes culturas del pasado terminaran en los museos. ¿Pero cómo se salva una cultura? El único sistema es arraigarla en Cristo. Ivanov percibió esta intuición también a propósito de las diversas tradiciones eclesiales. Unirlas a Cristo quiere decir hacerlas vivir en la comunión y no separadas ni aisladas. Esto que pertenece a Cristo, es de todos, y contribuye a mover el corazón hacia Él. Así podemos “respirar con dos pulmones”. Es exactamente lo que también yo trato de hacer desde hace noventa años.

*Fuente: L’Osservatore Romano

Traducción: La Buhardilla de Jerónimo




Benedicto XVI celebra el cumpleaños del cardenal Špidlík


Elogia su contribución a la síntesis teológica entre Oriente y Occidente


CIUDAD DEL VATICANO, jueves 17 de diciembre de 2009 (ZENIT.org).- El Papa Benedicto XVI quiso reconocer hoy la contribución del cardenal jesuita Tomáš Špidlík al diálogo teológico entre el Oriente y el Occidente cristianos, presidiendo esta mañana una eucaristía con motivo de su 90 cumpleaños, en la Capilla Redemptoris Mater del Palacio Apostólico Vaticano.

El cardenal Špidlík, originario de la República Checa (Boskovice, 1919) es un gran especialista en teología y espiritualidad orientales, y fundador del Centro “Aletti”, que depende del Pontificio Instituto Oriental.

Precisamente la Capilla Redemptoris Mater, obra de Marko Ivan Rupnik, sacerdote del centro “Aletti” se realizó bajo su supervisión, y en ella se quiso mostrar una síntesis artístico-teológica de la espiritualidad cristiana oriental y occidental.

El Papa subrayó en este sentido la importante aportación del cardenal Špidlík, “entretejiendo a través de los años una visión teológica vivaz y en muchos aspectos original, en la que confluyen orgánicamente el Oriente y el Occidente cristianos, intercambiándose recíprocamente sus dones”.

“Su fundamento es la vida en el Espíritu; el principio del conocimiento: el amor; el estudio: una iniciación a la memoria espiritual; el diálogo con el hombre concreto: un criterio indispensable, y su contexto: el cuerpo siempre vivo de Cristo, que es su Iglesia”.

“Estrechamente ligada a esta visión teológica está el ejercicio de la paternidad espiritual, que el cardenal Špidlík ha desarrollado constantemente y sigue desarrollando”, añadió el Papa.

El Papa subrayó la obra llevada a cabo por el Centro “Aletti” por él fundado, “que quiere recoger su preciosa enseñanza, haciéndola fructificar con nuevas intuiciones y nuevas investigaciones, también a través de su representación artística”.

“En este contexto, me parece particularmente hermoso subrayar el vínculo entre teología y arte brotado de su pensamiento”, añadió.

El cardenal Špidlík “ha recorrido un rico itinerario de pensamiento, comunicando siempre con ardor y profunda convicción que el centro de toda la Revelación es un Dios Tripersonal y que, en consecuencia, el hombre creado a su imagen es esencialmente un misterio de libertad y amor, que se realiza en la comunión: el modo mismo de ser de Dios”.

“Esta comunión no existe por sí misma, sino que procede – como no se cansa de afirmar el Oriente cristiano – de las Personas divinas que libremente se aman”, explicó el Papa.

“La libertad y el amor, elementos constitutivos de la persona, no son aprehensibles por medio de las categorías racionales, por lo que no se puede comprender a la persona si no es en el misterio de Cristo, verdadero Dios y verdadero hombre, y en la comunión con Él, que se convierte en acogida de la divino-humanidad también en nuestra existencia”.


16 diciembre 2009

Marxismo y martirio*



Mons. José Ignacio Munilla.



El domingo pasado asistimos en Roma a la beatificación de 498 mártires de la persecución religiosa de los años treinta en España. Entre ellos, tenemos el honor de contar con cincuenta y un mártires palentinos, asesinados en los meses posteriores al estallido de la Guerra Civil. Tampoco debemos olvidar el martirio del Hermano Bernardo, muerto en Barruelo en octubre de 1934, en el contexto de la persecución religiosa desatada en la revolución de Asturias.


Carlos Marx.


La Iglesia Católica ha destacado insistentemente que los mártires son aquellos que fueron asesinados por “odium fidei” (odio a la fe) y que murieron testimoniando su fe en Cristo. Ellos no lucharon en ningún frente, ni tomaron parte en ninguna contienda, sino que testimoniaron su amor incondicional hacia todos, y de una forma muy especial hacia quienes les tenían por enemigos.

En estos días previos a las beatificaciones, asistía yo a la proyección de un vídeo sobre los mártires. En la tertulia que siguió a la visualización del vídeo, un joven allí presente manifestó que le costaba entender cómo podía haberse desatado esa violencia tan cruel hacia miles de sacerdotes, religiosos y seglares católicos, que no habían hecho otra cosa en su vida que rezar, atender a pobres, niños, ancianos… Se sentía perplejo por aquella falta de respeto y de tolerancia.



Símbolo del comunismo adoptado por los marxistas-leninistas.


En efecto, al escucharle me percaté de que muchas personas pueden carecer de la visión histórica y filosófica necesarias para comprender el origen de aquella persecución antirreligiosa. En el fondo de aquel baño de sangre sin precedentes en la historia de España, estaba una ideología determinada que había sido inoculada en las masas: el marxismo.

Carlos Marx (1818-1883) hizo famosa aquella expresión de que “la religión es el opio del pueblo”. La religión no serviría sino para que los pobres se resignasen a su destino en esta vida, consolándose con el pensamiento en el más allá. Pero, claro, dado que esta interpretación no se compaginaba fácilmente con todas las obras sociales de la Iglesia a favor de los más desheredados, atacó sin piedad el ejercicio de la caridad, afirmando que no tenía otra finalidad que tranquilizar la conciencia de los ricos bienhechores, además de impedir la revolución de los pobres.


Hermano Bernardo, asesinado en Barruelo(Palencia).


Marx afirma que la condición “sine qua non” para la realización del hombre es la negación de la existencia de Dios. El hombre sólo podrá alcanzar su plenitud después de derribar a los dioses de su trono. En su opinión, de la misma forma a como los trabajadores están esclavizados por el “capital” (producto de su propio trabajo), así también los hombres están dominados por el producto de su propio cerebro (sus creencias religiosas).

Lo cierto es que el marxismo no pudo ser más claro en su llamada a la violencia. Llamaba a colgar a los capitalistas de las farolas más próximas. “Cuando llegue nuestro momento, no disfrazaremos nuestro terrorismo”. Dado que para el marxismo, cada persona es producto de su clase social, no hay esperanza alguna en que nadie pueda cambiar. No cabe la redención personal, sino sólo la revolución violenta que habría de liberar a la clase proletaria de la clase capitalista.

Uno de los motivos que llevan al marxismo a justificar plenamente la violencia es éste: no se reconoce la dignidad del individuo. La persona es absorbida por el “colectivo revolucionario”, por el “partido”, por la “causa”. Anulado el individuo, el marxismo incita a los prejuicios basados en la clase social y promueve la violencia.



San Héctor Valdivielso Sáez, martirizado en Turón(Asturias).


Al absorber a la persona dentro de una clase social, Marx estaba actuando de un modo semejante a Hitler, que encuadraba a las personas por razas. Curiosamente, una vez negado Dios –auténtico garante de la dignidad del hombre- el marxismo y el nazismo tuvieron consecuencias funestas similares: Auschwitz y el Archipiélago Gulag.

¿Cómo es posible que fuese aceptada una filosofía tan brutal cuya dinámica interna está abocada con toda certeza a la violencia y a la muerte? Algunos afirman que la explicación está en el atractivo mesiánico de Marx, quien incitó el espíritu de sus seguidores de forma astuta y despiadada. Explotó la miseria de los pobres hasta el extremo, presentándose como un mesías redentor de la tragedia del hombre, hasta el punto de reubicar el paraíso, convirtiéndolo en un reino terrenal.

A mi juicio, la persecución religiosa habida en Europa como consecuencia de la filosofía marxista, no es suficientemente conocida ni por jóvenes ni por adultos. ¿Cuántos saben -por poner un ejemplo- el dato fehaciente del asesinato de doscientos mil sacerdotes ortodoxos tras la revolución comunista en Rusia?

Es importante que entendamos que estas páginas tan negras de la historia de Europa, no pueden explicarse solamente por su contexto socio-político, sino que para su plena comprensión, es necesario conocer las ideas erróneas que han echado gasolina al fuego de las injusticias sociales. Bien sabemos que existen ideologías fratricidas que forman parte de la cultura de la muerte. En efecto, las ideas erróneas pueden ser también cómplices del asesinato de los inocentes.

Si verdad es aquello de que “quien siembra vientos, recoge tempestades”, más cierta es todavía la promesa de Cristo: “Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios…Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos.” (Mt. 5, 9-11).

*Mons. José Ignacio Munilla Aguirre (Obispo Administrador de Palencia y Obispo Electo de San Sebastián). (03.11.07 en El Norte de Castilla).






La Cruz y la Gloria: Algunos aspectos de la persecución religiosa en España durante la 2ª República y la Guerra Civil(1936-1939). Influyó notablemente la educaíón anticatólica que desde casi 60 años antes ejerció la Institución Libre de Enseñanza, así como las logias masónicas y por supuesto el marxismo. Memoria histórica. Duración:(1:03:23)





César Vidal analiza la persecución religiosa durante la guerra civil con Ángel David Martín Rubio y José Francisco Guijarro, sacerdotes e historiadores.Duración:(31':50")



01/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


02/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


03/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


04/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


05/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


06/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


07/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


08/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


09/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


10/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


11/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


12/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939


13/13 La persecución religiosa en España Guerra Civil Española 1936-1939

15 diciembre 2009

Bielorrusia: una iglesia en crecimiento tras el fin de la guerra fría

Finaliza hoy la visita Ad limina



CIUDAD DEL VATICANO, lunes 14 de diciembre de 2009 (ZENIT.org).- Antes del fin de la guerra fría la Iglesia en Bielorrusia no tenía ningún tipo de jerarquía. Había sacerdotes, uno que otro templo católico abierto pero sin diócesis que los congregara y obispos que las orientara.



Benedicto XVI.


Hoy, esta nación de la ex Unión Soviética de cerca de 10 millones de habitantes y de mayoría ortodoxa cuenta con un 14 % de católicos. Tiene una archidiócesis, tres diócesis y unas 450 parroquias.

Sus obispos están de visita ad Limina en Roma, la cual finaliza hoy lunes. Es la tercera desde que esta nación fue reconocida como tal en agosto de 1991 y la primera bajo el pontificado de Benedicto XVI.

Para Monseñor Tadeuz Kondrusiewicz, arzobispo de Minsk-Mohilev, (territorio que incluye la capital de este país), esta visita, que se realiza cada cinco años, representa “una especie de examen de conciencia para cada obispo”.



Monseñor Tadeuz Kondrusiewicz, arzobispo de Minsk-Mohilev.


Monseñor Kondrusiewicz, quien también es miembro de la Congregación para el Clero, fue el primer obispo de este país nombrado después de 60 años, en los cuales la Iglesia vivió sin jerarquía debido al régimen comunista.

Crecen los católicos

Tras la independencia de esta nación, reconoce el prelado, la Iglesia volvió a nacer. En 1991 había 220 parroquias. Hoy son más de 450. En todo el territorio nacional había sólo 60 sacerdotes nacidos en Bielorrusia, unos 60 más extranjeros y hoy son 440, de los cuales 270 han nacido allí.

En 1990 fue abierto el primer seminario en Grodno y en 2001 el segundo en Minsk. Cerca de 90 seminaristas están formándose y unos 60 más asisten a los seminarios religiosos.

Tienen actualmente un sitio web www.Catholic.by que publica noticias sobre la vida de la Iglesia universal y de Bielorrusia en varias lenguas como la bielorrusa el alemán, el ruso y el polaco.

Cerca de 14 mil fieles visitan diariamente esta página, que “para nosotros es como una grandísima parroquia”, subraya Monseñor Kondrusiewicz.

También se han traducido al bielorruso el misal, los documentos del Concilio Vaticano II así como los textos litúrgicos de todos los sacramentos: “Hoy tenemos un buen equipo de traductores que prepara muy bien la traducción en bielorruso. También tradujeron la última encíclica del Santo Padre”.

Jóvenes

Las nuevas iniciativas pastorales que se desarrollan en esta nación han atraído una gran cantidad de jóvenes, según lo constata el arzobispo de Minsk-Mohilev: “hemos organizado dos Jornadas de la Juventud que han tenido una gran participación”. El prelado señaló también que periódicamente dirige reuniones privadas con estos jóvenes, en las que se discuten temas más en profundidad.

Asimismo se refirió al diálogo que la iglesia realiza con el mundo académico: “en estos últimos dos años me han invitado en diferentes ocasiones las universidades estatales y otras universidades a dictar conferencias o a participar de encuentros con estudiantes y profesores”.



Episcopado de Bielorrusia.


En los medios de comunicación la Iglesia también ha encontrado un canal de participación. Tienen cuatro editoriales católicas. La radio y la televisión transmiten la misa dominical de la catedral de Minsk, “algo muy bueno, sobre todo para los enfermos y los niños del campo”, agrega monseñor Kondrusiewicz.

Desafíos

Pese al crecimiento del catolicismo y de los agentes pastorales en esta nación, monseñor Kondrusiewicz ha comentado que los sacerdotes extranjeros se enfrentan con algunas dificultades como la obtención de visas para vivir allí para desarrollar su servicio evangelizador.

También asegura que, a veces, los fieles necesitan más lugares para congregarse: “Hasta ahora para los 300 mil católicos de Minsk sólo hay cuatro iglesias, aunque las autoridades locales autorizaron hace poco la construcción de otras seis. El único problema hoy es dónde encontrar el dinero”, dice el arzobispo.

En cuanto al trabajo social la Cáritas desarrolla programas que congregan no sólo a católicos sino ortodoxos, protestantes, musulmanes y judíos, incluso personas no creyentes.

El trabajo social se focaliza en programas para ancianos, niños, limitados físicos y enfermos de cáncer y en la de prevención del SIDA. Con los ortodoxos realizaron una comisión para defender los valores de los medios de comunicación.

En Bielorrusia existe también una pequeña comunidad greco – católica, con quienes tienen una muy buena relación según señaló el arzobispo. También son muchas las familias mixtas de católicos casados con ortodoxos.

Una fe en crecimiento en esta joven nación de la Europa Oriental conocida también como la Rusia Blanca, compuesta por hombres y mujeres que han entendido, como dijo el año pasado el cardenal Tarcisio Bertone al visitar este país que “para ser libres no basta con derrumbar muros. Es necesario ser libres dentro y esto es posible sólo encontrando en la persona de Jesús la verdad de Dios”.


El Papa recibe a los obispos de Bielorrusia




Benedicto XVI: “Intensificar el camino común” con la Iglesia ortodoxa

Discurso a los obispos de Bielorrusia en visita “Ad limina”

CIUDAD DEL VATICANO, jueves 17 de diciembre de 2009 (ZENIT.org).- Ofrecemos a continuación el discurso del Papa a los obispos de la Conferencia Episcopal de Bielorrusia, presentes en Roma estos días para la visita “Ad limina Apostolorum”.


Señor cardenal,

venerados hermanos,

estoy contento de dirigiros a cada uno de vosotros mi cordial bienvenida a la casa del Sucesor de Pedro, a quien Cristo ha confiado la tarea de apacentar a su rebaño (cfr Jn 21,15-19), confirmar a los hermanos en la fe (cfr Lc 22,31), custodiar y promover la unidad eclesial (cfrLumen gentium, 22). Agradezco a monseñor Aleksander Kaskiewicz las palabras con las que ha querido presentar el camino de la Iglesia en Bielorussia, poniendo de manifiesto también los desafíos que la esperan.

En los encuentros que he tenido con vosotros, he apreciado el celo pastoral con el que lleváis a cabo vuestro ministerio, en el deseo y en el compromiso de que crezca cada vez más entre vosotros la corresponsabilidad, la comunión y la toma en común de las decisiones, para que vuestro servicio sea cada vez más fructífero. Es particularmente importante, de hecho, anunciar con renovado entusiasmo e incisividad el perenne mensaje del Evangelio en una sociedad que no es inmune a las tentaciones de la secularización, del hedonismo y del relativismo: los problemas de la falta de natalidad, de la fragilidad de las familias y de la ilusión de encontrar fortuna fuera de la propia tierra son un signo de ello.

Frente a tales desafíos, es tarea urgente de los Pastores manifestar la fuerza de la fe, una fe enraizada en una sólida tradición, para contribuir a preservar la profunda identidad cristiana de la Nación, en el diálogo respetuoso con las demás culturas y religiones. Para alcanzar este objetivo es necesario que, acogiendo la invitación del Salmo: “” (Sal 133,1), tened gran cuidado en formular programas y en promover métodos pastorales cada vez más adecuados, como también al llevar a cabo las decisiones de la Conferencia Episcopal. Este renovado testimonio de unidad, además de contribuir al anuncio del Evangelio, favorecerá la relación con la Autoridad civil y, particularmente, las relaciones ecuménicas.

Otro elemento que deseo subrayar es la especial atención que hay que poner, en la acción pastoral, a la dimensión educativa. Como he afirmado muchas veces, hoy vivimos en una especie de “emergencia” en este sector delicado y esencial, y es necesario multiplicar los esfuerzos para ofrecer, en primer lugar a las nuevas generaciones, una formación válida. Os animo, por tanto, a proseguir en vuestro compromiso, cuidando de que una catequesis adecuada marque el camino de fe en todas las etapas de la vida, y de que se den ocasiones, intra y extra eclesiales, para hacer llegar, bajo vuestra guía, el Mensaje de Cristo en cada ámbito del rebaño a vosotros confiado.

Singular relieve adquiere la preocupación por el discernimiento y el acompañamiento de las distintas vocaciones, en particular de las sacerdotales y religiosas, como también el empeño por favorecer programas destinados al crecimiento humano y cristiano de la juventud. Al respecto, os invito a vigilar atentamente para que los candidatos al sacerdocio reciban una sólida y rigurosa formación espiritual y teológica y sean debidamente guiados en la realización de una seria y profunda verificación de la llamada divina. La situación actual de nuestra sociedad requiere un discernimiento particularmente atento. Es importante, entonces, para el futuro de vuestra Iglesia que en Grodno y en Pinsk se siga ofreciendo a los jóvenes seminaristas un itinerario formativo completo y cualificado, y sea una preciosa oportunidad para promover una acción pastoral unitaria también el hecho de que ambas instituciones compartan el camino hacia el sacerdocio los candidatos al clero diocesano y al religioso.

Esta situación producirá frutos cada vez más prometedores si la propuesta educativa siga siendo el resultado de una intensa colaboración entre el obispo y los respectivos superiores religiosos, y será capaz de dar vida también a iniciativas para la formación permanente. Sed cercanos con cada vez mayor solicitud a vuestros sacerdotes, especialmente a los que comienzan si ministerio pastoral.. El ejercicio atento y cordial de la paternidad del obispo constituye un elemento fundamental para el éxito de una vida sacerdotal. Es necesario además tener siempre presente que el Señor os llama, como Pastores de la Iglesia, a saber discernir cada ministerio destinado a la edificación del cuerpo eclesial, también de carácter laical, cultural y civil, para que todos contribuyan a hacer crecer el Reino de Dios en Bielorussia, en el espíritu de una verdadera y real comunión para reclamar esos valores cristianos que han contribuido de modo determinante a la construcción de la civilización europea.

Queridos hermanos, sabed valorar cada justa aportación para anunciar y difundir el Reino de Dios, testimoniando con gestos concretos la fraternidad que genera la paz; la mansedumbre que acompaña a la justicia; el espíritu de comunión que huye de los personalismos; la caridad que es paciente y benigna, no es envidiosa, no se luce, no se vanagloria, nunca falta el respeto, no busca su propio interés, no se irrita, no lleva cuentas del mal recibido, se alegra de la verdad y cree todo, espera todo, soporta todo por amor de Cristo (cfr 1 Cor 13,4-7). En este contexto se plantea la colaboración fraterna con la Iglesia Ortodoxa de Bielorussia, cuyos pastores comparten con vosotros la búsqueda y el empeño en el bien de los fieles.

También las Iglesias ortodoxas, como la Iglesia católica, están fuertemente empeñadas en reflexionar sobre cómo responder a los desafíos de nuestro tiempo para transmitir con fidelidad el Mensaje de Cristo. Acogiendo la invitación del reciente encuentro católico-ortodoxo de Chipre, es necesario intensificar el camino común en esta dirección. Una aportación significativa podrá ser ofrecido por la pequeña pero ferviente comunidad greco-católica presente en el país. Ésta constituye un testimonio importante para la Iglesia y un don del Señor.

Hace algunos meses recibí al señor Presidente de la República de Bielorussia. En el encuentro, cordial y respetuoso, se reafirmó la voluntad de las partes de estipular un Acuerdo, cuya elaboración está en curso. Además traté sobre la particular atención con la que esta Sede Apostolica, como también la Conferencia Episcopal, siguen las circunstancias del país y el compromiso de una colaboración de hecho sobre materias de interés común, con el fin de promover, en el respeto de las competencias de cada ámbito, el bien de los ciudadanos.

Venerados hermanos, renovando mi gratitud, invoco a la Madre de Dios, tan amada en vuestra Tierra, para que os sostenga y os guíe con su protección. Con estos deseos y con particular afecto os imparto a vosotros, a los sacerdotes, a los religiosos, a las religiosas y a todos los fieles una especial Bendición Apostólica, mientras os aseguro mi recuerdo en la oración por todo el Pueblo bielorusso.




El Papa recibe al Primer Ministro de Montenegro, Milo Djukanovic
14/12/2009
El Papa Benedicto XVI recibió a Milo Djukanović, Primer Ministro de Montenegro.Durante los coloquios hubo un fructífero intercambio de opiniones sobre temas de actualidad y la situación de la región, como también sobre los desafíos principales que le esperan. A continuación, se subrayó la contribución positiva que la significativa minoría católica aporta a la sociedad montenegrina. Para finalizar, se detuvieron sobre el esfuerzo del gobierno para promover la paz y el equilibrio entre los pueblos y las confesiones religiosas presentes en el país.
Roma-Moscú: posible documento común en defensa de la tradición cristiana*


“Entre Roma y Moscú vuelve la primavera”, titula el vaticanista Sandro Magister su último artículo en Chiesa. Hace referencia a los últimos desarrollos en las relaciones entre la Iglesia Católica y el Patriarcado ortodoxo de Moscú. Además de recomendar el citado artículo de Magister, ofrecemos la traducción de una noticia en la que un importante representante del Patriarcado menciona la posibilidad de un “pacto común” para la defensa de la tradición cristiana.



El Patriarcado ortodoxo de Moscú está “dispuesto” a firmar con la Iglesia Católica un documento común “para la defensa de la tradición cristiana” – de la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural al sostén de la familia tradicional, desde la promoción de la presencia de las Iglesias en la esfera pública hasta la salvaguardia de los valores cristianos de Europa -, similar en los contenidos y en las formas a la Declaración de Manhattan suscrita del otro lado del océano por católicos, ortodoxos y protestantes para oponerse a la aprobación de “leyes injustas” por parte del Estado: lo ha dicho a ASCA el número dos del Departamento de Relaciones Eclesiásticas Externas del Patriarcado ortodoxo de Moscú, el hieromonje Philipp Ryabykh.





El religioso añadió, en efecto, que el Patriarcado moscovita está “ansioso” de realizar un paso similar porque “las dos Iglesias están dispuestas”. La ocasión para dar inicio a este tipo de “pacto”, explica, podría ser “la plenaria, prevista para los primeros días de febrero en Moscú, del Comité Consultivo Intercristiano para los Países de la ex -Unión Soviética y de Europa Oriental. “Es un comité ecuménico, pan-cristiano. En ese contexto, esperamos poder presentar una declaración para la defensa de la tradición cristiana similar a la estadounidense”.

La “defensa de los valores cristianos de la tradición” y la lucha contra el secularismo y el laicismo son, desde hace tiempo, temas de gran convergencia entre el Vaticano y Moscú. La Iglesia católica y los ortodoxos rusos han decidido poner en marcha un diálogo común con las instituciones europeas, como está previsto por el art. 17 del Tratado de Lisboa que ha entrado en vigor recientemente.





Pero esta colaboración podría ir más allá: la Declaración de Manhattan, lanzada en medio de la batalla sobre la reforma sanitaria en Estados Unidos querida por el presidente Barack Obama, apunta explícitamente a las llamadas “leyes injustas”: “no daremos nuestro consentimiento – se lee en aquel texto – a ningún edicto que nos obligue a nosotros o a las instituciones que dirigimos a realizar o a permitir abortos, investigaciones que destruyen embriones, suicidio asistido, eutanasia, o cualquier otro acto que viole los principios de la profunda, intrínseca e igual dignidad de todo miembro de la familia humana… Además, ha de saberse que no nos dejaremos reducir al silencio, o a la aceptación sumisa, o a la violación de nuestras conciencias, por ningún poder en la tierra, sea cultural o político, sin importar las consecuencias que esto pueda tener para nosotros”.






Ryabykh explica también el motivo de la carta enviada por el “ministro de asuntos exteriores” del Patriarcado de Moscú, el arzobispo Hilarion de Volokolamsk, a la presidente de la Iglesia luterana alemana, Margot Kassmann, que anunciaba la imposibilidad, por parte de los ortodoxos, de continuar el diálogo entre las dos Iglesias “en la misma forma” después de la elección de una mujer como cabeza de los protestantes de Alemania y a la luz de las divergencias en el campo ético que se han “agravado de modo dramático”. Una carta que ha llevado a los luteranos alemanes, como respuesta, a cancelar las celebraciones por los 50 años del comienzo del diálogo teológico con los ortodoxos.

Para el vice-presidente del Departamento de Relaciones Eclesiásticas Externas de la Iglesia ortodoxa rusa, esta decisión es la consecuencia inevitable de la “decadencia” del ecumenismo como ha sido practicado en las últimas décadas: “Por décadas – afirma Ryabykh – los intentos de los cristianos de elaborar una posición teológica común no han tenido éxito. Actualmente, incluso sobre los temas éticos hay tensiones y desacuerdos que en el pasado no existían”.

“Eutanasia, aborto, matrimonio homosexual – prosigue -: las nuevas divisiones sobre estos temas no permiten a los cristianos actuar juntos en las mismas formas del pasado”. Desde este punto de vista, añade, una iniciativa como la Declaración de Manhattan es un “buen signo”, porque “ha sido sostenida por católicos, ortodoxos y protestantes. En la actualidad, falta una estructura de diálogo entre las principales tradiciones cristianas con el objetivo principal de defender la tradición cristiana en el mundo moderno, en las diversas sociedades, a nivel internacional”.




Ryabykh subraya el “siempre creciente” acuerdo con la Iglesia Católica, pero recuerda que es “todavía pronto” para hablar de un encuentro entre el Papa Benedicto XVI y el Patriarca moscovita Kirill: “Apreciamos el encuentro del Papa con el presidente ruso Medvedev – explica –, pero persisten los problemas con la Iglesia greco-católica en Ucrania que sigue tratando de ampliarse y hacer proselitismo. El encuentro entre los jefes de las dos Iglesias debería ser preparado por las partes de modo que se resuelvan estos problemas, y esto es todavía muy difícil”. La posibilidad de un encuentro, concluye, está “en la agenda” pero “aún no está fijado o en preparación”.



*Fuente: Papa Ratzinger Blog
Traducción: La Buhardilla de Jerónimo

07 diciembre 2009



Cardenal
Kasper: "Ecumenismo no tiene nada que ver con sincretismo”


El diálogo sólo es posible “si ambas partes mantienen su identidad”




MINSK, domingo, 15 noviembre 2009 (ZENIT.org).-

El diálogo ecuménico entre confesiones cristianas sólo es posible "si las partes mantienen su identidad" y consiguen "escucharse, cambiar la forma de pensar y los corazones", proceso que "no tiene nada que ver con el sincretismo religioso".

Así lo afirmó el pasado martes el cardenal Walter Kasper, presidente del Consejo Pontificio para la Unidad de los Cristianos, durante una reunión con los miembros de la Conferencia de Obispos Católicos de Bielorrusia.



Cardenal Walter Kasper.


Según explicó, el ecumenismo "no nació ayer, sino durante la Última Cena, cuando Jesús proclamó: Ut unum sint - Que sean uno. Cristo fundó la Iglesia única. Las divisiones dentro de ella son las consecuencias del pecado".

"La aspiración a la unidad de los cristianos es ante todo una realidad espiritual, y de ahí que su corazón sea el ecumenismo espiritual", explicó el cardenal. El camino a la comunión, por tanto, pasa por la oración y la perseverancia. "La perseverancia debe ser, con todo, por las dos partes", advirtió.

"Necesitamos escuchar a otras personas, cambiar nuestra manera de pensar y nuestros corazones. Solo entonces estaremos en el verdadero ecumenismo".

Este proceso, advirtió, "no tiene nada que ver con el sincretismo, ya que el diálogo es posible mientras ambas partes mantengan su identidad".



Benedicto XVI.


"Nuestros enemigos hoy no son las demás confesiones, sino el secularismo y la falta de Dios. Por eso necesitamos responder juntos a los desafíos del presente", subrayó el cardenal Kasper.

El presidente del Consejo Pontificio afirmó que existen tres columnas de diálogo entre cristianos: el diálogo con la Iglesia ortodoxa, el diálogo con las comunidades protestantes y el diálogo con los nuevos movimientos religiosos.

El viento de dios from Fraternità san Carlo on Vimeo.


El viento de Dios. Vida de una Fraternidad. Evangelizando en Novosibirsk Siberia Rusia. (Duración 27:16)

Los misioneros de la Fraternidad de san Carlos Borromeo, ligada a Comunión y Liberación, CL, fundada en 1985 por don Massimo Camisasca.


Respecto al diálogo con los ortodoxos, el purpurado explicó que éste "está ya en su segunda fase, la del diálogo teológico. Después de una pausa que duró un par de años, el diálogo se retomó en 2005".



El Patriarca ruso Kirill I, en una reunión con autoridades ortodoxas.


"En los últimos años se celebraron tres reuniones, en este contexto - en Belgrado, Rávena y Chipre. El último de ellos se dedicó a la cuestión de la primacía del Obispo de Roma en el primer milenio. Se han dado pequeños pasos, pero queda mucho por delante. Uno de los aspectos positivos es que ambas partes están dispuestas a continuar el diálogo iniciado".

En cuanto al diálogo con los protestantes, explicó, "se ha hecho mucho", pero "han aparecido muchos problemas ocasionados por el liberalismo en la esfera de la moralidad de las Iglesias protestantes".

En este sentido, afirmó que el diálogo con los anglicanos "es de especial importancia", y que la constitución apostólica "Anglicanorum Coetibus", "es una respuesta a la petición de los anglicanos, cuya comunidad hoy perdura gran división".



El Reverendísimo Dr. Rowan Williams es el centésimo cuarto y actual Arzobispo de Canterbury.


En septiembre de 2010 el Papa viajará al Reino Unido y visitará probablemente la Abadía de Westminster, donde fueron condenados Santo Tomás Moro y otros mártires católicos, y la Universidad de Oxford.



Catedral de Canterbury.


Según la prensa inglesa, Benedicto XVI viajará a Inglaterra del 16 al 19 de septiembre y beatificará al cardenal John Henry Newman en el estadio de Wembley.



Papa y primado anglicano acuerdan reforzar diálogo ecuménico

El Papa viajará a Inglaterra y visitará Oxford


Desde Enrique VIII hasta Queen Elisabeth: ¿Qué separa a católicos y anglicanos?

21 de noviembre, 2009. La plena comunión entre la Iglesia católica y la Iglesia anglicana ha protagonizado el diálogo ecuménico desde el Concilio Vaticano II.

La meta final es que las dos Iglesias celebren juntas los mismos sacramentos y tengan los mismos pastores.

Como la Iglesia Anglicana nació fruto de un cisma protagonizado por el rey Enrique VIII y no de una herejía, a pesar de la profunda división, los católicos y los anglicanos tienen más cosas en común de lo que se piensa.

Sin embargo, ambas confesiones entablaron esta fase del diálogo ecuménico porque existen tres importantes diferencias entre católicos y anglicanos: primero, la ordenación de mujeres como sacerdotes y obispos, después, varias cuestiones morales; y por último, el papel del Papa en la Iglesia.

El reverendo Bill Franklin Director Asociado de la Academia Americana (Roma), asegura que ya se ha resuelto aproximadamente el 90% de las diferencias que nacieron en los años de la Reforma protestante. Ahora espera que se resuelva el 10% restante.

“Creo antes o después se resolverán, igual que hemos resuelto los demás problemas. Pero llevará su tiempo. Hay que ser pacientes. Son muy importantes la amistad y las buenas relaciones entre ambas Iglesias. Y es importante no darse por vencidos demasiado pronto en el campo ecuménico”.

El diálogo ecuménico ha dejado de ser una opción y se ha convertido en algo habitual. El último capítulo es la buena reacción del líder anglicano a la decisión del Papa de crear ordinariatos personales para acoger anglicanos en la Iglesia Católica. Un paso mucho más que positivo en el diálogo ecuménico entre las dos Iglesias.


Un católico y un anglicano enseñan juntos un curso sobre ecumenismo

No todos los días un sacerdote católico y un sacerdote anglicano dan clase juntos sobre diálogo entre cristianos.

Pero esto es lo que ha querido organizar el Departamento de Ecumenismo de la Universidad Santo Tomás de Aquino de Roma para su curso sobre el dialogo ecuménico.

La clase va más allá de las confesiones cristianas y ofrece a los estudiantes dos puntos de vista contemporáneos sobre temas que han dividido históricamente a católicos y anglicanos.

Prof. Roderick Strange Rector, Colegio Beda (Roma)

Espero que cuando los alumnos nos vean discutiendo sobre diferentes puntos de vista, y aportando diferentes perspectivas a las mismas preguntas, logren reconocer y aprender sobre el diálogo ecuménico y entender las diferentes tradiciones que existen entre ambas iglesias.

Rev. Bill Franklin American Academy (Roma)

En la clase de hoy presenté la Reforma desde el punto de vista anglicano. Luego, durante el descanso el profesor Strange me dijo, ¡Ahora me toca a mí dar el punto de vista católico! Ese tipo de dinamismo es la novedad de este curso, porque los alumnos se dan cuenta de que aunque tenemos diferentes perspectivas sobre el mismo tema, al final seguimos siendo amigos.

Precisamente, lo que más gusta a los alumnos es la actitud de los profesores. Una relación que pretende reflejar una de las amistades más famosas de la Iglesia.

Se trata del cardenal John Henry Newman y Edward Pusey, un católico y un anglicano, ambos líderes del Movimiento Oxford, que siguieron siendo amigos incluso después de que Newman abandonase la Iglesia anglicana por la católica.

Prof. Roderick Strange Rector, Colegio Beda (Roma)

A través del curso nos hemos hecho amigos. Salvando las distancias es una amistad como la de Newman y Pusey en el siglo XIX.

Rev. Bill Franklin American Academy (Roma)

Lo bonito es entender cómo dos figuras de la Iglesia del siglo XIX y dos figuras de la Iglesia en el siglo XXI pueden tener una amistad profunda, incluso durante un momento en el cual nuestras Iglesias no están de acuerdo al 100% en todos los temas.

Por eso, la lección más importante del padre Bill y del padre Roderick es que los alumnos también fomenten amistades como lo hicieron ellos, teniendo en mente el recuerdo de John Henry Newman y John Pusey.


Exposición sobre los mártires católicos de la reforma protestante

Esta es una historia de misiones secretas, espías y espiritualidad que se entremezclan en la muestra Una peregrinación: Una misión

Una exposición que se adentra en la historia del Seminario inglés de Roma, construído sobre esta cripta del año 1330.

P. Andrew Headon Director de la exposición

Quería unir la historia de la Iglesia a la historia de la cripta para hablar del seminario y del colegio.

Al inicio, este lugar era un horfanato pero en 1579 se convirtió en seminario.

La exposición muestra el viaje secreto desde Roma a Inglaterra de unos sacerdotes jesuítas durante la reforma protestante del siglo XVI.

La reforma protestante comenzó cuando el rey Enrique VIII abandonó la Iglesia católica y fundó la Iglesia de Inglaterra. Durante esos años se destruyeron iglesias y conventos, y hasta se declaró ilegal ser sacerdote católico.

Entonces se fundaron seminarios católicos en el extranjero como el llamado Venerable Colegio Inglés de Roma, que continuó formando sacerdotes ingleses. Eran misioneros que volverían a Inglaterra para defender su fe, aunque fuera a costa de sus vidas.

Esta exposición muestra la historia de muchos de los sacerdotes que fueron apresados, torturados y martirizados.

El sacerdote Andrew Headon asegura que incluso este seminario fue escenario de ataques y persecuciones.

P. Andrew Headon Director de la exposición

En aquellos tiempos no había facebook, no sabían qué aspecto tenían los seminaristas católicos. Por eso enviaron espías a los seminarios y a las comunidades para poder reconocerlos cuando regresaran a Inglaterra

La muestra también incluye la reproducción de una celda de la cárcel en la que muchos de los sacerdotes y seminaristas fueron encarcelados.
Además, los visitantes también pueden hacerse una idea de cómo los sacerdotes tenían que esconderse.

P. Andrew Headon Director de la exposición

Es difícil ponerse en su piel y saber qué pensaban. La mayoría de ellos estaban dispuestos a dar su vida por su fe en ese momento.

La exposición coincide con la reapertura de la capilla del Venerable Colegio Inglés, construída en el año 1888.

Durante los últimos dos años, cada pieza de los mosaicos y de los cuadros ha sido cuidadosamente restaurada.

Durante los años de persecución, los estudiantes del colegio cantaban el Te Deum cada vez que sabían que uno de sus antiguos compañeros había sido martirizado.

Lo hicieron 44 veces, ya que 44 estudiantes del colegio inglés fueron martirizados a lo largo de 100 años.

P. Andrew Headon Director de la exposición

Es una exposición increíble, porque no sólo explica la historia, sino también reta al espectador, es una peregrinación, una misión en sí misma.

Una misión que estará abierta al público hasta julio del año 2010.


El Papa crea Ordinariatos para acoger diócesis anglicanas 2009-10-20


Publicada la ley para acoger anglicanos en la Iglesia católica

El Vaticano publica la ley para acoger anglicanos en la Iglesia católica

10 noviembre 2009. El Papa ha firmado la norma canónica que permite la creación de “Ordinariatos personales” para los anglicanos que quieran hacerse católicos. La nueva ley les permite mantener muchas de sus tradiciones.


El documento es una Constitución apostólica y se llama “Anglicanorum coetibus”, es decir “grupos de anglicanos”.

El Vaticano subraya que no pretende atraer anglicanos a sus filas sino sólo responder a los obispos, sacerdotes y laicos de la Iglesia anglicana que ya han pedido al Papa ser acogidos en la Iglesia católica.

A partir de ahora puede haber uno o varios ordinariatos de ex-anglicanos por cada conferencia episcopal. Por ejemplo, habrá uno o varios ordinariatos para Estados Unidos, uno o varios para Canadá, o uno o varios para Francia.

Los ordinariatos serán creados por la Congregación para la Doctrina de la Fe, el departamento del Vaticano que estudia las situaciones especiales, como la de los sacerdotes anglicanos casados.

La principal novedad es que el Papa nombrará ordinario a uno de los tres candidatos que le proponga el consejo de gobierno de cada Ordinariato.

Los obispos anglicanos casados serán recibidos sólo como sacerdotes, pero podrán ser ordinarios. O sea que gobernarán a sus fieles, pero no podrán ordenar sacerdotes u obispos.

En cualquier caso, el ordinario tendrá los mismos poderes que los obispos de las diócesis católicas. Por ejemplo, podrá crear órdenes religiosas, intervenir en la conferencia episcopal o establecer una parroquia.

Por norma, le ayudará a gobernar un consejo de gobierno formado por al menos 6 sacerdotes y otro consejo le ayudará a administrar las finanzas.

Sólo podrán formar parte del ordinariato católicos procedentes de la Iglesia anglicana, quienes deberán manifestar por escrito su voluntad de hacerse católicos.

El Vaticano calcula que pasarán algunos meses antes de que se cree el primer ordinariato anglicano.

Según cifras oficiales, al menos 50 obispos han pedido ser acogidos en la Iglesia católica junto con sus fieles.


Ortodoxos búlgaros piden la unidad con los católicos

La Iglesia ortodoxa búlgara ha reconocido que es urgente encontrar la unidad con los católicos.

El presidente de la diócesis para Europa central y occidental del Patriarcado de Bulgaria, Tichon Ivanov, dijo al Papa que esta unión es necesaria porque los ciudadanos no entienden las divisiones y discusiones entre católicos y ortodoxos.

Respecto a la reunión del Comité de Diálogo entre católicos y ortodoxos que se celebra estos días en Chipre, Ivanov señaló que no se debe tener miedo a encontrar un modo de celebrar juntos la Eucaristía.

La Iglesia ortodoxa de Bulgaria se convirtió en autónoma o autocéfala en el año 927 y cuenta con 6 millones de fieles. En el mundo hay un total de 225 millones de ortodoxos.


Comienzan conversaciones entre el Vaticano y los Lefebvrianos

26 octubre 2009. Los tradicionalistas lefebvrianos quieren volver a la Iglesia Católica y el Vaticano ha aceptado estudiar con ellos las condiciones para su posible regreso.

En la primera reunión, celebrada en el Vaticano, las dos delegaciones elaboraron un plan y un calendario de trabajo.

Los lefebvrianos no aceptan algunos puntos del magisterio de los últimos papas ni tampoco algunos principios del Concilio Vaticano II como la libertad religiosa, la posibilidad de diálogo con otras religiones e iglesias y la colegialidad entre obispos.

Benedicto XVI levantó en enero de 2009 la excomunión de los obispos ordenados irregularmente por Marcel Lefebvre pero su situación canónica está todavía sin clarificar. Por eso no forman parte de la jerarquía católica.

Según sus datos, los lefebvrianos cuentan con más de 400 sacerdotes, varios centenares de seminaristas y religiosos, y alrededor de 100.000 seguidores en todo el mundo.


Primer Ministro de Ucrania Yulia Tymoshenko visita el Papa


Vietnam: Dimite arzobispo de Hanoi tras presiones del gobierno

24 noviembre 2009. El arzobispo de Hanoi ha presentado su dimisión alegando motivos de salud. Se trata de monseñor Joseph Ngo Quang Kiet, de 57 años y uno de los principales líderes de la Iglesia católica en Vietnam.

Pero muchos católicos vietnamitas piensan que la dimisión se debe a presiones del gobierno vietnamita.

De hecho, el presidente del Comité Popular de Hanoi ha pedido en varias ocasiones su dimisión. Le responsabiliza de las protestas de católicos por la venta de terrenos expropiados a la Iglesia. El presidente del Comité Popular de Hanoi acusó al obispo de “no respetar ni cooperar con las autoridades para resolver el problema”.

Se trata de terrenos que fueron expropiados a mediados de los años 50 tras la llegada de los comunistas al poder. Ahora el gobierno quiere venderlos a privados y destinarlos a uso comercial.

El Papa escribe a los obispos de Vietnam 2009-11-26

26 de noviembre. Benedicto XVI ha escrito a los obispos de Vietnam por el 350 aniversario de la creación de las primeras diócesis católicas en el país.

El Papa les desea que el aniversario sirva para consolidar su fe, ya que, denuncia el Papa, “algunas veces ha sido puesta a prueba”.

Además, pide que las celebraciones lleven a la reconciliación con Dios y con el prójimo. En concreto, Benedicto XVI pide que se reconozcan “las faltas del pasado y del presente cometidas contra compatriotas”.

El Papa también anima a los obispos a estar unidos y a trabajar por una sociedad justa, solidaria y equitativa a través del diálogo auténtico, el respeto mútuo y la sana colaboración.

Se trata de un mensaje cordial que prepara el terreno para un posible encuentro entre el Papa y el presidente de Vietnam en las próximas semanas.

El aniversario ha coincidido con la dimisión del obispo de Hanoi. Monseñor Joseph Ngo Quang Kiet, de 57 años ha asegurado que dimite por motivos de salud. Pero muchos católicos vietnamitas piensan que se debe a presiones del gobierno vietnamita. De hecho, el presidente del Comité Popular de Hanoi pidió su dimisión porque le acusó de “no respetar ni cooperar con las autoridades” para acabar con las protestas de católicos por la venta de terrenos expropiados a la Iglesia.

El Papa reclama al presidente de Vietnam mayor libertad religiosa

El Papa recibe a Nguyên Minh Triêt, presidente de Vietnam


Universidad pontificia en Roma colaborará con Univerisdad Chengchi de Taiwan

22 octubre 2009. En Roma se ha firmado el acuerdo entre la Pontificia Universidad de la Santa Cruz y la National Chengchi University de Taiwan.

El proyecto involucrará elementos tanto culturales como académicos. A partir de ahora, ambas universidades intercambiarán estudiantes y profesores.

Prof. Wei-Wen Chung National Chengchi University

“Vivimos en un mundo globalizado. Y los estudiantes estarán en un ambiente cultural diferente. Será algo bueno para su educación y ensanchará sus horizontes”.

Prof. Luis Romera Rector, Pontificia Universidad de la Santa Cruz

“Yo creo que para un estudiante del mundo asiático, concretamente de China, venir a Roma significa abrirse a una realidad, no solamente europea sino mundial”.

La Pontificia Universidad de la Santa Cruz colabora con otras universidades de países muy distintos, pero dice que este proyecto será especial por la rica cultura e historia que va a aportar la universidad asiática.

Prof. Luis Romera Rector, Pontificia Universidad de la Santa Cruz

“Este tipo de colaboraciones permiten a los estudiantes conocer una cultura muy antigua y enriquecerse, por lo tanto, con transiciones que ayudan también a entendernos a nosotros mismos como seres humanos”.

La Universidad Chengchi, actualmente en Taipei, fundada en 1927, es considerada por el ministerio de educación de Taiwán como la mejor universidad para estudiantes extranjeros.

La Pontificia Universidad de la Santa Cruz de Roma tiene unos 1.500 estudiantes provenientes de 77 países.

Dirección
00186 Roma - Italia
Piazza S. Apollinare, 49
Tel. +39 06 681641
Fax +39 06 68164400
santacroce@pusc.it
Pontificia Università della Santa Croce

National Chengchi University
64, Sec. 2, Zhinan Rd., Taipei City, 11605 TAIWAN
Universidad Nacional de Chengchi


El Papa visitará la sinagoga de Roma

15 octubre 2009. El Papa visitará la sinagoga de Roma en enero de 2010 y se convertirá en el segundo Papa que la visita. Juan Pablo II estuvo allí en 1986.

Benedicto XVI ya ha visitado otras sinagogas. En 2005 fue a la de Colonia, Alemania, y en 2008 visitó una en Nueva York. Ahora toca el turno de la que está más cerca del Vaticano.

La visita tendrá lugar el domingo 17 de enero. Con ella el Vaticano espera dar un paso más en la mejora de las relaciones entre católicos y judíos.